Volver a la pagina anterior El objetivo principal de un cliente que se dirige a la tienda de barrio más cercana a su domicilio es encontrar un producto de la variedad y marca que desea de forma inmediata. Que el mismo no se encuentre disponible, desencadena todo un conjunto de situaciones perjudiciales, no sólo para el consumidor sino para quienes tienen la función de satisfacer sus requerimientos.
No contar con una tienda correctamente abastecida termina siendo un problema para las empresas de consumo masivo, las tiendas de barrio y los clientes. Pero ¿Cómo impacta el faltante de un producto en los actores de la cadena de compra-venta? ¿De qué forma la inteligencia artificial contribuye a mejorar el abastecimiento de las tiendas?
Un producto faltante: menos ventas, más clientes insatisfechos
Cuando un consumidor no encuentra el producto que desea adquirir en un almacén, impacta de forma negativa en todos los stakeholders que intervienen en el proceso de compra-venta.
Tanto para la empresa como para la tienda de barrio el impacto económico es perjudicial: para la primera se traduce en una reducción directa de las ventas o venta perdida, un daño a su imagen y percepción de la marca, la pérdida de confianza de un cliente y su traslado a la marca de un competidor. Adicionalmente, para el tendero, el quiebre de stock desemboca en clientes menos satisfechos con su consecuente pérdida de lealtad. Finalmente, cuando el cliente no encuentra el artículo específico, se abren varias opciones: puede elegir otra marca, concurrir a otro establecimiento o desistir de la compra. Sin importar la decisión que tome, ninguno de estos escenarios es favorable para el tendero ni para la empresa de consumo masivo.
Por tales razones, evitar el quiebre de stock debe estar en la lista de prioridades de las empresas.
¿Cómo evitar los quiebres de stock? La inteligencia artificial al rescate
Existen dos razones por las cuales deja de aparecer un artículo en un punto de venta:
- Datos inexactos que llevan a la falta de pronóstico de la demanda del cliente por falta de información sobre lo que ocurre en las tiendas.
- Discrepancias sobre el inventario que conduce al aprovisionamiento de cantidades incorrectas.
Afortunadamente, estas situaciones pueden evitarse gracias a la transformación digital del canal tradicional, la cual contribuye a garantizar el abastecimiento de los productos y a prevenir los quiebres de stock a través de la inteligencia artificial. Haciendo uso de un sistema inteligente (como una app móvil o un software de gestión) las empresas de consumo masivo pueden obtener datos de ventas de cada tienda de manera inmediata y actualizada y saber cuáles son los productos infaltables, su rotación y frecuencias de compra.
De esta forma, gracias a la precisión y predicción, la inteligencia artificial aprende del comportamiento del usuario y le permite tener a los vendedores un conocimiento claro de las cantidades y tipos de productos que requieren ofrecer a cada cliente, previniendo con ello las faltas de stock. El resultado concreto es la disminución del desabastecimiento de la canasta base, es decir, que las tiendas siempre tengan disponibles los productos infaltables.
Para el tendero, la digitalización permite advertir la falta de stock y hacer pedidos en línea de forma sencilla y eficaz a través de una plataforma e-commerce B2B con un conocimiento detallado del perfil del usuario y de los tiempos de entrega. El resultado es una personalización de cada tienda con una gran eficacia a la hora de reponer los productos y garantizar el abastecimiento. El objetivo último es que el cliente tenga disponible el artículo que desea en tiempo y forma.
Una relación ganar-ganar
Garantizar la disponibilidad del producto buscado es una función elemental de las tiendas de barrio, más aún en los países de América Latina donde el canal tradicional tiene una fuerte valoración debido a que impacta en la microeconomía de cada país.
Lograr atender a cada uno de los clientes de manera individual según sus necesidades y brindarle una experiencia satisfactoria resulta provechoso tanto para la tienda de barrio como para las empresas de consumo masivo. La inversión en inteligencia artificial garantiza un mayor crecimiento y optimización en el cumplimiento de los objetivos: reducir los quiebres de stocks, disminuir la venta perdida, asegurar las ventas y no menos importante, mantener la lealtad del cliente con la marca y el tendero.
